17 datos
sobre Oatly y la nutrición
El presente artículo está destinado al Reino Unido y la UE; en otros países puede aplicarse una normativa distinta. Contenido sujeto a cambios. Si deseas información actualizada o tienes alguna pregunta, ponte en contacto con info@oatly.com.
¿Te interesa conocer el valor nutricional de las bebidas de avena? Estás en el lugar indicado. En Oatly llevamos más de 30 años estudiando la avena, las bebidas vegetales y sus cualidades nutricionales. Se puede decir que somos expertos. Probablemente no quieras pasarte el día pensando (o soñando) con las bebidas de avena, así que nos hemos sentado con nuestra responsable de Ciencia y Tecnología, la profesora Caroline Orfila Jenkins, y nuestros expertos en nutrición para crear este breve artículo. Toda la información está respaldada por estudios y fuentes independientes que se relacionan a continuación y que puedes consultar, si despiertan tu curiosidad. Esperamos que así sea. Pero, ante todo, esperamos que este artículo consiga que tu concepto de Oatly sea tan bueno como el que tenemos nosotros. Recuerda que se puede comer sano y de forma sostenible de mil maneras distintas: tú decides qué es lo mejor para ti, tu familia y el planeta. Come y bebe conforme a lo que crees.
En este artículo encontrarás lo que debes saber sobre nuestras bebidas más famosas, como Barista Edition, y todas aquellas que vienen en cartón azul (por ej., Light, Semi, Entera, No Sugars). Todas ellas son bebidas fortificadas sin sabores añadidos: las heroínas cotidianas de Oatly. Sea cual fuere el motivo que te ha llevado a elegir Oatly —por su sabor; porque los lácteos no son lo tuyo o porque intentas reducir su consumo por el bien del planeta (¡ole tú!)— nuestras bebidas son deliciosas (vale, este dato no ha sido probado científicamente), tienen un menor impacto climático que la la leche de vaca mediay, además, son una opción igualmente nutritiva. Las bebidas fortificadas de Oatly aprovechan las cualidades propias de la avena, más otras vitaminas y minerales que añadimos. Estas cualidades pueden variar ligeramente de un mercado a otro (debido a la legislación), pero, normalmente:
- Son una fuente rica en calcio, necesario para el mantenimiento normal de dientes y huesos, el metabolismo energético y el funcionamiento de los sistemas muscular, nervioso y digestivo.
- Son una fuente rica en yodo, que contribuye a la función cognitiva y neurológica normal, al metabolismo energético, al buen funcionamiento de la tiroides y la producción de hormonas tiroideas. (Ojo: no es el caso de Dinamarca, donde las normas de fortificación son diferentes).
- Son una fuente rica en riboflavina (B2), que contribuye al metabolismo energético normal y al funcionamiento del sistema nervioso, los glóbulos rojos, la piel y la vista, al tiempo que ayuda a reducir el cansancio.
- Son una fuente de vitamina B12, que contribuye al funcionamiento normal de los glóbulos rojos y de los sistemas nervioso e inmunitario, y ayuda a reducir el cansancio.
- Son una fuente rica en vitamina D, que contribuye a la absorción normal del calcio y al mantenimiento de los huesos, dientes y músculos, así como al funcionamiento normal del sistema inmunitario.
- Son bajas en grasas saturadas y ricas en grasas no saturadas (excepto la versión Light, que no contiene grasas). Sustituir las grasas saturadas por las insaturadas en la dieta contribuye a mantener niveles normales de colesterol en sangre.
- Contienen fibra, lo cual es importante, porque muchos de nosotros no consumimos suficientes alimentos que la contengan.
- Son bajas en sal.
- No contienen azúcares añadidos ni edulcorantes (excepto nuestras bebidas saborizadas, evidentemente).
- No contienen derivados lácteos (proteínas de la leche, lactosa) ni tampoco soja.
- Nunca se elaboran a partir de concentrado ni sirope.
Nuestras bebidas de avena también tienen un menor impacto climático que la leche de vaca media.Sabiendo lo que sabes, ¡ahora te dará más satisfacción tener un brick de Oatly en la nevera!
1.
El poder de la avena.
La avena europea es la materia prima principal de nuestros productos, y conservamos gran parte de sus propiedades en nuestras bebidas. A menudo se hace referencia a la avena como un «superalimento» porque contiene un buen equilibrio de macro y micronutrientes necesarios y, comparada con muchos otros cereales, proteínas de mejor calidad y más grasas insaturadas saludables. También es una buena fuente de fibra alimentaria. Estudios clínicos han demostrado que las personas que toman productos que contienen avena mejoran sus niveles de colesterol, el índice de masa corporal y el perímetro abdominal. Otros estudios apuntan a que la avena y los productos a base de ella podrían contribuir a prevenir las enfermedades cardiovasculares.
2.
Las bebidas Oatly no contienen lácteos.
Todos nuestros productos están 100 % exentos de lácteos (y, por tanto, también de lactosa). Y no es poca cosa. En el mundo hay miles de millones de personas intolerantes a la lactosa que, gracias a Oatly, tienen una bebida alternativa.
Esta imagen tiene sentido, mientras ignores la palabra NUQ.
3.
Las distintas cualidades de Oatly y la leche de vaca.
Este tema se plantea a menudo, así que entremos en materia. La bebida de avena tiene un perfil nutricional diferente al de la leche, porque una viene de la vaca y la otra, de la avena, que sale de la tierra. Ambas son muy nutritivas. A modo de ejemplo, comparemos Oatly Semi con la típica leche de vaca semidesnatada.
La bebida de avena Semi fortificada de Oatly tiene más:
- Fibra alimentaria
- Grasa insaturada
- Vitamina D*
- Hidratos de carbono...
... casi la misma cantidad de:
- Calorías
- Grasas totales
- Azúcares**
- Calcio
- Riboflavina
- Sal
… y menos:
- Grasas saturadas
- Proteínas
- Yodo*
- Vitamina A
- Vitamina B12*
- Colesterol
* La verdad es que, casi siempre, esto depende de la vaca y de cómo se procese la leche.
** Derivado del almidón que se encuentra en nuestra avena.
Si eres de esa gente a la que le gustan las tablas, te mostramos aquí una comparación desglosada entre Oatly Semi y la leche de vaca semidesnatada.
Valores por 100 ml | Leche de vaca semidesnatada* | Bebida de avena Oatly Semi |
---|---|---|
Valor energético (kcal) | 46–48 | 48 |
Grasas (g) | 1,4–1,8 | 1,5 |
Grasas saturadas (g) | 0,9–1,1 | 0,2 |
Grasa insaturada (g) | 0,3–0,5 | 1,3 |
Colesterol (mg) | 5–7,2 | 0 |
Hidratos de carbono totales (g) | 4,8–5,0 | 7,1 |
de los cuales azúcares (g) | 4,8–5,0 | 3,4 |
Fibra alimentaria (g) | 0,0 | 0,8 |
Proteínas (g) | 3,0-3,7 | 1,1 |
Sal (g) | 0,1 | 0,1 |
Vitamina D (µg) | Trazas** | 1,1 |
Riboflavina (mg) | 0,15–0,25 | 0,21 |
Vitamina B12 (µg) | 0,2–0,9 | 0,24–0,38 |
Calcio (mg) | 113–127 | 120 |
Yodo (µg) | 10–32 | 22,5*** |
* Intervalo de niveles de nutrientes para la leche de vaca semidesnatada, tanto refrigerada como a temperatura ambiente. Los datos de Francia, Países Bajos, Suecia, Suiza y Reino Unido se obtuvieron en mayo de 2024, mientras que los de Finlandia en marzo de 2025; en todos los casos a partir de bases de datos nacionales de composición disponibles públicamente.
** Excepto en Suecia, donde es obligatorio fortificar la leche con vitamina D a razón de 0,95 μg - 1,10 μg por cada 100 ml; o Finlandia donde se recomienda añadir 1 μg por cada 100 ml.
*** Ojo: no se aplica a Noruega ni a Dinamarca por el momento.
¿Y qué hay de las otras opciones vegetales? En general, la bebida de avena suele contener más fibra; la de soja, más proteína y la de coco, más grasas saturadas. En definitiva, depende de qué beneficios nutricionales busques y qué sabor prefieras tú. La avena es una muy buena opción.
4.
Nutricionalmente hablando, no hay ningún problema en sustituir la leche de vaca por una bebida de avena fortificada.*
Como lo lees. Las bebidas vegetales enriquecidas como Oatly son una opción muy nutritiva y están incluidas en varias directrices dietéticas oficiales internacionales.
* Si eres menor de 12 meses, te corresponde una dieta más específica (pero qué bien que hayas aprendido a leer). Ante cualquier duda, consulta siempre a tu médico o farmacéutico.
5.
Fortificamos intencionadamente nuestros productos. Esto es lo que significa.
Fortificar es una forma elegante de decir que añadimos vitaminas y minerales a los alimentos durante su producción. Al hacerlo, debemos enumerarlos como ingredientes. Hay muchos alimentos fortificados, y la Organización Mundial de la Salud los recomienda como forma eficaz y segura de mejorar la salud pública y reducir las deficiencias nutricionales. Esto significa que, además de todos los beneficios que aporta la avena, le añadimos calcio, yodo, riboflavina y vitaminas B12 y D.
6.
El cuento de las proteínas.
La avena contiene proteínas de primera calidad, fáciles de digerir y con más aminoácidos esenciales que la mayoría de los cereales, lo cual es brutal. Sin embargo, el ser humano necesita toda la secuencia de aminoácidos procedente de distintas fuentes de proteína. En general, las bebidas de avena contienen menos proteínas que la leche de vaca. ¿Pero son estas proteínas de la leche algo que deba preocuparnos mínimamente? Pues parece que no. Según estudios dietéticos, la mayoría consumimos diariamente más proteínas de las que necesitamos. De hecho, obtener la cantidad diaria recomendada de proteínas, con todos los aminoácidos esenciales incluidos, no es un problema, siempre que se siga una dieta equilibrada y variada y se cubran las necesidades energéticas. Así que no parece que echar un poco menos de proteína al desayuno o al café de media tarde vaya a suponer demasiada diferencia.
7.
Las bebidas de avena contienen grasas insaturadas: las grasas saludables.
Necesitamos grasas en nuestra dieta para obtener energía y para poder absorber las vitaminas liposolubles, como la vitamina D. También son una fuente de ácidos grasos esenciales que el organismo no puede fabricar por sí mismo y son importantes, entre otras cosas, para la salud inmunitaria. Básicamente, hay dos tipos de grasas: las saturadas y las insaturadas. Las grasas insaturadas suelen denominarse «grasas buenas» y se encuentran en los aceites vegetales, los frutos secos, las semillas y... ¡las bebidas de avena Oatly! Por contra, las grasas saturadas (presentes en la carne grasa, los lácteos enteros, la mantequilla, el ghee, la manteca de cerdo, el aceite de palma o el aceite de coco) deben consumirse con moderación y sustituirse por grasas insaturadas siempre que sea posible. Está demostrado que sustituir las grasas saturadas por insaturadas reduce los niveles de colesterol.El colesterol alto es un factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades coronarias.
Sustituir las grasas saturadas por insaturadas = ¡BRUTAL!
8.
El de nabina es uno de los mejores aceites que existen.
Las grasas confieren a la leche un sabor cremoso y ayudan a que espume cuando se hierve al vapor antes de verterla sobre el café. En cambio, la avena es, por naturaleza, baja en materia grasa. Por eso, por cada litro de nuestras bebidas (salvo las opciones Light), añadimos una o dos cucharadas de aceite de nabina (o canola, que es lo mismo) para aportar más valor nutricional y recrear la textura cremosa de los lácteos. ¿El aceite de nabina es bueno para la salud? Pese a lo que hayas podido oír por ahí, es muy bueno. Es uno de los mejores aceites que existen y en Europa se consume desde hace décadas. El aceite de nabina de nuestras bebidas tiene una composición excelente, con más grasa insaturada y menos grasa saturada que la mayoría de los aceites vegetales. Pero no lo decimos nosotros. El aceite de nabina, como sustituto de las grasas sólidas, es protagonista en las recomendaciones a escala mundial, como la guía Eatwell en Reino Unido, la rueda alimentaria sueca, las pautas dietéticas para estadounidenses o las directrices de la Organización Mundial de la Salud.
«The Seeds of Love» no es solo el gran álbum de Tears for Fears de 1989. También es el título de esta ilustración.
9.
Las bebidas de avena Oatly contienen hidratos de carbono que te dan energía.
La avena contiene una excelente combinación de hidratos de carbono amiláceos, proteínas y grasas; y lo mismo pasa con la bebida de avena. Los hidratos de carbono son importantes, son una fuente energética esencial. Y las directrices dietéticas recomiendan que entre el 45 y el 60 % de nuestra energía diaria proceda de ellos. Un vaso grande de bebida de avena o un chorrito en el café equivalen respectivamente al 6 % y al 0,5 % de la recomendación diaria.
10.
No les añadimos ni azúcar ni edulcorantes.
No añadimos azúcar ni edulcorantes a ninguna de nuestras bebidas (a menos que hablemos de la de chocolate, claro está). El azúcar que figura en el reverso de nuestros envases procede del almidón de la avena. Se descompone en azúcares durante la elaboración, de forma similar a como el cuerpo humano convierte el almidón en azúcar durante la digestión. El azúcar que contienen nuestras bebidas es de aproximadamente una cucharadita (3,5 g) por cada 100 ml, lo que es similar (incluso inferior) a los niveles de la leche de vaca. Si prefieres un sabor más suave y menos dulce, puedes decantarte por nuestras opciones No Sugars, disponibles en algunos mercados, en las que no descomponemos tanto los azúcares de la avena y dejamos que tu cuerpo lo haga por ti.
Un refresco normal tiene una carga glucémica de casi el doble que la bebida de avena.
11.
La carga glucémica de Oatly es baja.
Los niveles de azúcar en sangre varían a lo largo del día, y también después de comer o beber: es algo normal en la fisiología humana. Controlar los niveles de azúcar en sangre solo es realmente importante para las personas que tienen diabetes. La carga glucémica (CG), que tiene en cuenta la respuesta de la glucosa en sangre a los carbohidratos en una porción, muestra que un vaso grande de Oatly Barista Edition (240 ml) o un chorrito en el café (20-40 ml) están dentro de la categoría «baja» en lo referente a la CG. La leche de vaca equivalente (entera) también se encuentra en la categoría baja. Como era de esperar, la glucosa en sangre no responde igual a la leche de vaca que a la bebida de avena, y esto se debe a que los hidratos de carbono que contienen son ligeramente diferentes (lactosa en la leche de vaca, frente a maltosa y carbohidratos amiláceos en la bebida de avena). A pesar de estas diferencias, ambas se sitúan en la misma categoría «baja», por lo que es poco probable que debas preocuparte cuando tomes tu próximo cappuccino. Para que sirva de ejemplo, una lata de refresco (250 ml) tiene una CG de casi el doble que la bebida de avena, y si es de 500 ml, ya hablamos de la categoría alta.
12.
Las bebidas de avena están procesadas, y eso es algo bueno.
Para convertir la avena en bebida, la pasamos por un proceso de producción, porque técnicamente no puedes exprimir la avena con la mano y sacar leche. Créenos, lo intentamos. Que un alimento esté «procesado» no significa que no sea saludable; el término se refiere solamente a cómo ha sido elaborado, es decir, si se ha enlatado, troceado, congelado, exprimido, fortificado, pasteurizado o secado. ¿Y sabes una cosa? Muchos de los procesos que empleamos, como el tratamiento térmico o la homogeneización, son similares a los de la leche de vaca. Solo que nosotros prescindimos de la vaca. La transformación de alimentos ha sido practicada por los humanos durante siglos para reducir la pérdida de nutrientes, evitar el desperdicio de comida y ofrecer a la gente alimentos seguros, nutritivos y más asequibles. Muy práctico.
Técnicamente no puedes exprimir una avena con la mano y sacar leche. Créenos, lo intentamos.
13.
Explicación de los alimentos ultraprocesados.
«Alimentos ultraprocesados» (UPF por sus siglas en inglés, Ultra-Processed Foods) es un término comodín que se ha simplificado demasiado en los medios con el significado de 'malos y poco saludables'. Claro que muchos alimentos ultraprocesados tienen un alto contenido en grasas saturadas, azúcar y sal, y deben consumirse con moderación, pero también hay muchos otros que no. Las aplicaciones que puntúan alimentos y los escritores gastronómicos clasificarán las bebidas vegetales como «ultraprocesadas»... ¡por el simple hecho de haberles añadido vitaminas y minerales! Sin embargo, una bebida vegetal fortificada es mejor que una que no lo sea y, por ello, son recomendadas en el mundo entero. Confuso, ¿a que sí? Por eso, muchos de los que pertenecemos al mundo de la alimentación y la ciencia opinamos que hay que seguir las pautas dietéticas basadas en la calidad nutricional, no en cómo se fabrica el producto. Si para ti es importante el proceso, puedes elegir las opciones ecológicas de Oatly (por desgracia, no siempre fortificadas debido a la normativa de la UE/Reino Unido). También puedes fabricar tu propia bebida de avena casera (seguramente, lo intentarás una sola vez). No olvides que no te beneficiarás de las vitaminas y minerales que añadimos a nuestras bebidas fortificadas, así que procura obtener esos nutrientes esenciales de otras fuentes.
Añadimos más chispa a la ya poderosa avena.
14.
Acerca de los aditivos.
Siempre intentamos reducir al mínimo el número de ingredientes de nuestros productos sin renunciar al sabor, el valor nutricional ni la calidad (a nadie le gusta que la leche se corte en el café). Por eso contamos con un equipo experto en Ciencia, Tecnología e Innovación que revisa y mejora periódicamente nuestras recetas. En Oatly Barista Edition, por ejemplo, solamente hay agua, avena, un poco de aceite de nabina, cantidades muy pequeñas de sal, vitaminas y minerales, y un corrector de la acidez llamado fosfato dipotásico. El fosfato dipotásico es un aditivo aprobado y seguro que equilibra el nivel de pH del café (que es bastante ácido) y evita que nuestras bebidas de avena se cuajen al añadirlas. No empleamos emulgentes, estabilizantes, colorantes ni saborizantes. Nuestras bebidas Oatly Organic, disponibles en algunos mercados, contienen aún menos ingredientes (por si eso es importante para ti).
15.
Sí, Oatly es principalmente agua, como la mayoría de las bebidas.
La hidratación es importante para el ser humano. Y al igual que la leche de vaca, las demás bebidas, incluidas las vegetales como Oatly, están compuestas de alrededor de un 90 % de agua. El resto es avena, un toque de vitaminas y minerales, y otros ingredientes importantes como el aceite de nabina, necesarios para el sabor, el valor nutricional y la consistencia. La proporción adecuada de agua, avena y otros ingredientes es lo que hace que nuestras bebidas estén tan ricas. Si tuvieran un 60 % de avena, probablemente tendrías que beberlas con tenedor.
16.
La avena no contiene gluten.
En la mayoría de los establecimientos donde se vende Oatly, no anunciamos que nuestros productos sean «sin gluten». Esto se debe a que nuestra increíble avena puede contener pequeñas trazas de otros cereales, como trigo, cebada o centeno. Pueden ser arrastradas por el viento desde un campo cercano o entrar en nuestros molinos accidentalmente. Son cantidades extremadamente pequeñas, pero incluso estas minúsculas partículas pueden dar problemas para las personas sensibles o intolerantes al gluten. Por tanto, no prometemos una bebida completamente sin gluten (a menos que vivas en EE. UU., donde nuestros productos sí están certificados, porque nos abastecemos de una avena sin gluten garantizada).
17.
Las bebidas de Oatly tienen un menor impacto climático que la leche de vaca media.*
Nuestras bebidas generan menos emisiones de gases de efecto invernadero que la leche de vaca media. De hecho, los estudios que analizan el ciclo de vida de nuestras bebidas demuestran que el impacto es entre un 44 % y un 80 % menor por litro. Eso significa que cada litro de leche de vaca que se sustituye por Oatly reduce el impacto climático sobre las personas y el planeta, y eso es algo de lo que estamos muy orgullosos.
Gracias por acompañarnos hasta el final del artículo. Bueno, no te llevas ningún premio por llegar hasta aquí, pero ahora sabes mucho más sobre Oatly y nuestras bebidas. Si deseas más información sobre nuestros productos o su valor nutricional, te invitamos a visitar oatly.com y a contactar con nuestro equipo de Nutrición en info@oatly.com. Les encantan las preguntas difíciles. Y, por si te has saltado el artículo, aquí tienes la versión abreviada:
Aparte de no contener lácteos ni soja, las bebidas fortificadas de Oatly se benefician de las cualidades de la avena, que contiene minerales como el calcio, riboflavina y vitaminas B12 y D. Tienen un bajo contenido de sal y grasas saturadas — y lo mejor de todo, su impacto climático es menor que el de la leche de vaca media.
¿No te quedas conforme sin cotejar los datos? Muy bien, pues aquí tienes unas tablas con información sobre el contenido nutricional de nuestra gama enriquecida.